La Isla de Ré, situada en la costa atlántica de Francia, es famosa por su encanto natural, pueblos pintorescos y playas vírgenes. Conocida como un destino vacacional tranquilo, ofrece una mezcla perfecta de historia, naturaleza y una atmósfera relajada. Si visitas esta isla, aquí tienes 12 cosas imprescindibles que ver y hacer.
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1. Saint-Martin-de-Ré
El pueblo fortificado de Saint-Martin-de-Ré, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es la capital histórica de la isla. El puerto, rodeado de casas blancas con contraventanas verdes, es el lugar ideal para pasear y disfrutar del ambiente relajado. Sus murallas, diseñadas por Vauban, son perfectas para caminar mientras disfrutas de vistas al mar.
2. La Flotte
Otro de los pueblos más bellos de la isla es La Flotte, con su puerto animado y su mercado medieval. Sus callejones estrechos y empedrados están llenos de encanto, y su mercado al aire libre es perfecto para comprar productos locales, como queso, ostras y vinos. No te pierdas la Abadía de los Chateliers, situada en las afueras, un imponente monasterio en ruinas que ofrece un ambiente histórico único.
3. Phare des Baleines
El faro de las Ballenas (Phare des Baleines) es una visita obligada. Situado en el extremo noroeste de la isla, ofrece vistas panorámicas impresionantes del océano Atlántico. Tras subir los 257 escalones, podrás disfrutar de una vista inmejorable de la isla y sus costas. Al pie del faro, hay un pequeño museo que explica su historia y función.
4. Las playas de la Isla de Ré
La Isla de Ré es famosa por sus hermosas playas. La Plage de la Conche des Baleines, cerca del Phare des Baleines, es una de las más espectaculares con su arena fina y aguas cristalinas. La Plage du Gros Jonc, en Le Bois-Plage-en-Ré, es perfecta para familias y deportes acuáticos como el surf y el paddle surf. También está la Plage des Gollandières, ideal para relajarse en un ambiente tranquilo.
5. Las marismas salinas
Las marismas salinas de la Isla de Ré, llamadas marais salants, son una de las características más distintivas de la isla. Puedes visitar las salinas y aprender sobre el proceso de recolección de sal, una tradición ancestral en la isla. Algunas de las salinas ofrecen visitas guiadas y venta de productos locales, como la famosa fleur de sel.
6. El Fuerte de La Prée
El Fuerte de La Prée es la fortaleza más antigua de la isla, construida en 1625 para defenderla de los ataques piratas y proteger la región. Hoy en día, es un lugar fascinante para explorar, con murallas desde donde se tienen excelentes vistas del mar y los alrededores. Es un sitio lleno de historia, perfecto para quienes disfrutan de la arquitectura militar.
7. Puente de la Isla de Ré
El Pont de l’Île de Ré es el puente que conecta la isla con la ciudad de La Rochelle. Cruza los 3 km de este impresionante puente y disfruta de las vistas panorámicas mientras te diriges a la isla. Es una excelente manera de comenzar o terminar tu visita, con vistas al océano Atlántico y a los barcos que navegan bajo el puente.
8. Paseo en bicicleta por la isla
La Isla de Ré es un lugar ideal para recorrer en bicicleta, con más de 100 km de carriles bici que atraviesan viñedos, marismas y pueblos costeros. Alquilar una bicicleta es la mejor manera de moverse por la isla y disfrutar de su paisaje natural. Puedes hacer un recorrido desde Saint-Martin-de-Ré hasta las playas, pasando por los encantadores pueblos de Ars-en-Ré y La Couarde-sur-Mer.
9. Ars-en-Ré
El pueblo de Ars-en-Ré, con su icónica iglesia de campanario blanco y negro, es otro lugar lleno de encanto. Es considerado uno de los pueblos más bonitos de Francia, con su puerto pesquero y sus casas tradicionales. Pasear por sus calles estrechas es una delicia, y el puerto es un buen lugar para relajarse y disfrutar de la vista de los barcos.
10. Les Portes-en-Ré
En el extremo norte de la isla se encuentra Les Portes-en-Ré, un encantador pueblo conocido por sus playas vírgenes y paisajes tranquilos. Las playas de Trousse-Chemise y Petit Bec son ideales para quienes buscan más privacidad y naturaleza. También es una zona perfecta para practicar deportes acuáticos o simplemente disfrutar de la calma.
11. Puerto de Loix
El pueblo de Loix, situado en una pequeña península, está rodeado de marismas y tiene un puerto pintoresco. Loix es conocido por su ambiente relajado y su conexión con la naturaleza. Es un excelente lugar para disfrutar de paseos por la costa, observar la fauna local y visitar el Ecomuseo del Sal, que ofrece una inmersión en la tradición de la extracción de sal en la isla.
12. Mercados de la Isla de Ré
Los mercados locales de la Isla de Ré son una visita obligada. Cada pueblo tiene su propio mercado, donde se pueden encontrar productos frescos locales, como ostras, vinos, quesos y artesanías. El mercado de La Flotte es especialmente popular por su estilo medieval, mientras que el de Le Bois-Plage es el más grande de la isla. Es el lugar perfecto para sumergirse en la cultura local y degustar delicias regionales.
La Isla de Ré es un destino perfecto para quienes buscan disfrutar de la naturaleza, la historia y la tranquilidad, con una mezcla de playas, pueblos pintorescos y rutas para recorrer en bicicleta. Ya sea explorando sus playas, descubriendo su rica historia o paseando por sus mercados, la Isla de Ré ofrece una experiencia inolvidable para los amantes del aire libre y la vida costera. Descubre las 9 mejores playas en Isla de Ré que no puedes perderte.